Ficha técnica Autor: Martín Iguaran
Primera edición: 2021
Editorial: Autopublicado (ed. 2022)
Número de páginas: 264
ISBN: 978-8412399264 |
Sinopsis
"Viajar a San Severino, un pueblo casi abandonado y perdido en la inmensidad de la llanura pampeana, es una tarea poco atractiva para Francisco Castro, abogado de Buenos Aires. Sin embargo, no tiene opción: un pariente lejano ha fallecido y debe encargarse de los trámites legales. Su novia Marisa ha decidido acompañarlo. Su pariente vivía en el Castillo, una inmensa mansión centenaria, y ahora les toca habitarla por unos días. No podrán adivinar las experiencias surreales y alucinantes que tendrán que vivir dentro de sus muros..."
Opinión
"El Castillo de San Severino" es una novela de terror sobrenatural, suspense, maldiciones y secretos familiares. Está ambientada en la Argentina actual e inspirada en las leyendas de fantasmas de finales del siglo XIX.
Todo empieza cuando Francisco Castro, un abogado de la Ciudad de Buenos Aires, recibe la noticia de la muerte de un pariente lejano a quien jamás conoció: Alberto Aliaga Morejón, un aristócrata que residía en el pequeño pueblo de San Severino. Por petición de su madre, Fran viaja hasta San Severino para visitar la residencia de su pariente, una mansión a la que todos conocen como Castillo (aunque es tan grande que más bien parece un laberinto), con la intención de tramitar la herencia. Con la ayuda de Marisa, su pareja, Fran investiga el pasado de los Aliaga Morejón, que se remota unos cuarenta años atrás, y eso levanta ampollas entre los vecinos. Por si eso fuera poco, todo cobra un cariz extraño cuando empiezan a oír ruidos inquietantes en el Castillo...
La novela tarda en arrancar y hay tramos en los que la narración se ralentiza debido a las detalladas explicaciones históricas; si bien tienen que ver con la historia principal, en ocasiones sirven más bien para ayudarnos a entender el contexto de las épocas pasadas y del estado de San Severino. No obstante, creo que todo ello es una buena antesala para la historia que nos espera: el autor sabe cómo introducir al lector en esa atmósfera inquietante en la que todo está bien y, de pronto, la situación se tuerce y empiezan a suceder cosas que no se pueden explicar.
La historia se pone súper interesante hacia el final, cuando las pistas van encajando y la acción va in crescendo hasta resolver el misterio. La resolución es perfecta, y las frases finales me han puesto la piel de gallina.
El Castillo Sniafa fue una de las inspiraciones para redactar mi novela. El casco de estilo francés tenía 32 habitaciones, baños, cocina, piletas y lagunas artificiales. Abandonado durante 20 años, un incendio casi lo destruyó. #ElCastillodeSanSeverino, @EdicionesPasser. pic.twitter.com/aYcRxPM0Mo
— Martín Iguaran (@iguaran_martin) September 16, 2021
~Publicación en el Twitter del autor / Fuente~
Acerca del estilo, el autor ha conseguido infundir dos características de su persona al texto: la primera, que es argentino, por lo que a lo largo de la narración encontramos dialectos, expresiones y referencias a su tierra; la segunda, que es abogado, igual que el protagonista y narrador, por lo que emplea hábilmente los tecnicismos jurídicos. Ambos detalles enriquecen el texto, dándole verosimilitud; además, los pies de página aclaran varias de las referencias a la abogacía, la arquitectura, la historia o el urbanismo argentino, de forma que el lector que no esté familiarizado con ellas no se pierde ningún detalle.
En la novela también encontramos algunos bocetos de San Severino que fueron realizados por el padre de Martín. Estas imágenes nos ayudan a hacernos una idea del estado del pueblo y del castillo, además de que tienen mucha relación con el misterio de la historia.
Al final del libro hay una nota del autor en la que explica cuál fue la inspiración para la historia: "La provincia de Buenos Aires cuenta con numerosos palacios construidos a finales del siglo XIX y principios del XX. Algunas familias acaudaladas, al igual que los Aliaga Morejón en la novela, desearon dejar su marca en las comarcas que gobernaban. Algunos de estos palacios y castillos fueron construidos como regalos de amor a prometidas, pero debido a diferentes factores la mayoría se encuentra en ruinas. Los cambios bruscos de la economía, los problemas intrafamiliares y lo costoso del mantenimiento de estas suntuosas estructuras en medio del aislamiento de la pampa desencadenaron el abandono y la decadencia de los castillos. Sin embargo, esto también generó un sinfín de leyendas sobre fantasmas, espíritus en pena y otros eventos sobrenaturales".
Conclusión: 4/5
"El Castillo de San Severino" me ha gustado: mantiene fácilmente la atención del lector, está bien escrita y cuenta muchísimas curiosidades históricas y paranormales sobre Argentina.
Sobre el autor: Martín Iguaran
"(Buenos Aires, 1994). Abogado graduado de la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires. Adicto a la lectura en todos sus formatos. Fanático del horror, la ciencia ficción, la novela histórica y el misterio. Editor de la Revista Literaria Terminus. Ganador de una mención honorífica en el II Concurso Internacional de Cuento de Terror 'Alas de Cuervo', 2023." (Fuente del texto)
Cita destacada
Los mitos se originaban en alguna parte; una mínima dosis de verdad contenían, camuflada por las deformaciones añadidas década tras década.
~XXIII~
Agradecimientos
Al autor, Martín Iguaran, por proporcionarme un ejemplar digital de "El Castillo de San Severino" para la realización de esta reseña.
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