Cuéntame un cuento de hadas | Cine de Escritor

26 febrero 2015

Cuéntame un cuento de hadas

Estados Unidos celebra su "Tell a Fairy Tale Day" ("Día para contar cuentos de hadas")


Elsie Wright posa en su jardín con un hada - Cine de Escritor
     Elsie Wright posa en su jardín con un hada / Fuente de la imagen 


Año 1917, población de Cottingley (Bradford, condado inglés de Yorkshire). Frances Griffiths, de 10 años, y Elsie Wright, de 16, toman unas fotografías en el jardín de su casa. Esto no sería nada extraordinario si no fuera porque aparecen posando… con un grupo de hadas.

Dicen que las encontraron casualmente y decidieron retratarlas con su cámara Midg. La familia no les concede demasiada importancia, ni siquiera cuando, pasados unos meses, las niñas les enseñan nuevas instantáneas.

Este suceso comienza a extenderse poco a poco, llegando a oídos de Arthur Conan Doyle, que hace poco ha publicado su segunda novela sobre un detective llamado Sherlock Holmes. Conan Doyle, ayudado por Edward Gardner, uno de los miembros de la sociedad teosófica de Londres, realiza una minuciosa investigación de los hechos. Analizadas las fotografías por expertos en revelado y trucaje, y en la propia firma Kodak, no se consigue demostrar que los negativos hayan sido manipulados.

Adepto al ocultismo y al espiritismo, Conan Doyle no sólo acepta la autenticidad de las fotografías, sino que en 1923 las publica junto con los resultados de su investigación en el libro "The Coming of the Faeries" ("El misterio de las hadas" en la edición española) añadiendo informaciones sobre las costumbres, el carácter y el lenguaje de dichos seres. Algunos le creen, pero la mayoría se cuestiona el estado mental del escritor.

Frances Griffiths rodeada de hadas en julio de 1917 - Cine de Escritor
     Frances Griffiths rodeada de hadas en julio de 1917 / Fuente de la imagen 

Tendrán que pasar sesenta años para que un tal Fred Gettings hojee el libro infantil "Princess Mary's Gift Book", publicado en 1915, y se dé cuenta de que las ilustraciones de las hadas que aparecen en él son idénticas a las que aparecen en las fotos de las niñas. Al verse descubiertas, Elsie admite que ella y Frances recortaron las imágenes de su libro, las clavaron con alfileres de sombrero en el suelo y se fotografiaron. No se atrevieron a decir la verdad cuando el caso se complicó, especialmente tras la seria labor realizada por Conan Doyle y Gardner.

Por su parte, Frances aseguró que su prima sólo quería que el asunto se olvidara cuando antes, puesto que realmente posaron junto a las hadas en el jardín de su casa de Cottingley.

El caso se hizo tan famoso que se publicaron varios estudios acerca de cómo consiguieron trucar las imágenes. En 1997 se estrenó una película basada en esta historia, denominada "Fairy Tale: A True Story" (traducido como "Un cuento de hadas" en España), del director Charles Sturridge.


Las hadas en la historia

Fotograma de la película Peter Pan, de Clyde Geronimi, Wilfred Jackson y Hamilton Luske - Cine de Escritor
      Fotograma de la película "Peter Pan" (1953), de Clyde Geronimi, Wilfred Jackson y Hamilton Luske 


"Has de saber, Wendy, que cuando el primer niño que nació se rió por primera vez, su risa se rompió en mil pedazos que empezaron a saltar y a brincar por todas partes; éste fue el origen de las hadas". Ésta es la explicación que J.M. Barrie detalló en su novela más famosa, "Peter Pan" (1911), sobre el nacimiento de estas criaturas.

Sin embargo, sus orígenes son aún más remotos. Las mitologías griega y romana ya hablaban de las Hados, unas hermosas mujeres cuyo cometido era proteger la naturaleza. Los primeros hombres miraban a los cielos y se imaginaban a los dioses, mientras que en la tierra imaginaron a las hadas, los espíritus de los bosques, el aire, el agua y las flores.

Por su parte, los celtas hablaban de las Áes Sídhe, unos seres semi-divinos con alas de mariposa que vivían entre dos mundos; más tarde se añadiría que el 21 de junio, el solsticio de verano y la celebración de la Noche de San Juan, festividad cristiana de origen pagano, se abría una puerta entre ambos mundos y las criaturas mágicas danzaban a sus anchas entre los humanos.

Las leyendas representaban a las Áes Sídhe con la piel y los ojos muy claros, el pelo negro y una estatura humana. Su tamaño disminuiría cuando William Shakespeare difundió sus propias versiones en "Sueño de una noche de verano" (1595), "La Tempestad" (1611) y otras obras teatrales.

Durante la Edad Media se propagó la creencia que las algunas hadas poseían poderes perversos con los que dañaban la naturaleza y raptaban niños humanos, cambiándolos por sus propios vástagos con el fin de crear mestizos. Por ello se decía que los niños pálidos y delgados eran, en realidad, hijos de las hadas. 


El origen del término "cuentos de hadas"

Salón de damas, por Abraham Bosse (siglo XVII) - Cine de Escritor
     "Salón de damas", del pintor Abraham Bosse / Fuente de la imagen 


Existen diversos relatos sobre estos seres pero, curiosamente, los cuentos de hadas no sólo tratan sobre ellas, sino también sobre otros entes mitológicos o fantásticos como duendes, trolls, elfos, sirenas, gigantes y demás criaturas del bosque. Lo que caracteriza a todas estas narraciones es un inicio al estilo "Había una vez…" y un final con "Y fueron felices y comieron perdices".

Se dice que la primera persona en acuñar el término "cuentos de hadas" fue Marie-Catherine le Jumelle de Barneville, baronesa d'Aulnoy, quien realizaba salones literarios en los que se reunían los nobles y disfrutaban de conversaciones intelectuales sobre literatura. Fue aquí, en la Francia del siglo XVII, donde nació el estilo literario denominado préciosité, que consistía en la narración de historias inventadas utilizando juegos de palabras.

Al principio se destinaban a todo tipo de público, pero más tarde se enfocaron sólo a los niños por su contenido didáctico y moralizante. Esta moda influyó en escritores como Gabrielle Suzanne Barbot de Villeneue, la autora de "La Bella y la Bestia" (1740), y Charles Perrault, conocido por algunos cuentos típicos de la tradición oral actual como "La bella durmiente del bosque", "Caperucita roja" o "El gato con botas", publicados en la recopilación "Cuentos de mamá ganso" (1967).

Actualmente las historias de hadas han resurgido gracias a películas como "Hansel y Gretel: cazadores de brujas" (2013), "Maléfica" (2014) o "Into the Woods" (2014) y a series de televisión entre las que destacan "El décimo reino" (2000) y "Once Upon a Time" ("Érase una vez", 2011); en ellas, los personajes de los cuentos populares entran en contacto con los humanos del siglo XX y XXI, respectivamente, por error o para que les ayuden a salvar su mundo.


Sobre el "Tell a Fairy Tale Day"

     "Tell a Fairy Tale Day" es una fiesta de EEUU que se celebra cada 26 de febrero Fuente de la imagen 


El 26 de febrero los estadounidenses celebran una fiesta no oficial llamada "Tell a Fairy Tale Day" ("Día para contar cuentos de hadas"), en los que se organizan veladas especiales con cuentacuentos o los propios padres narran a sus hijos las historias que tanto les gustaron siendo niños.

No se conoce con exactitud el origen de esta festividad, pero se atribuye a las compañías de cartas de felicitación con fines comerciales. La finalidad sigue siendo es la misma: animar a gente de todas las edades a leer cuentos de hadas y disfrutar de la magia de sus palabras.

Ya se lo advirtió Peter Pan a Wendy: "Como los niños de ahora quieren ser tan sabios, dejan enseguida de creer en las hadas, y cada vez que un niño dice <<Yo no creo en las hadas>>, cae muerta una de ellas". Lo único que puede salvarlas son los aplausos de los niños, demostrando así que no piensan que sean simples mitos.

Si aún creéis en las hadas, o lo que es lo mismo, si creéis en la importancia de inculcar los valores que transmiten los cuentos, entonces aplaudid. Aplaudid con fuerza.



Fuentes:

Comparte si te ha gustado ;)